La epifanía del sátiro del Raval
Entre cánticos dionisiacos, danzas voluptuosas y desenfreno etílico, celebramos hoy en el piso franco la llegada al mundo de nuestro mesías, nuestro paladín, nuestro guía espiritual. Un anticristo venido de nuestras peores resacas, de nuestras libidinosas pesadillas, de nuestros ínfimos momentos de lucidez.
El mundo no volverá a ser el mismo... y este blog tampoco. Fe de ello presta el escudo de armas del piso franco, visible en adelante en la cabecera de la web, tal como establece la ley de banderas 39/1981 acordada por el Muy Honrado Consejo del Piso Franco.
3 comentarios:
¡¡¡Las actas!!! ¡¡¡Queremos ver las actas de ese acuerdo!!!
vaya tela tenéis, amigos
Antónimo
Esta página es lo más, un saludo y felicidades
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